
Dieciocho días han pasado desde la última entrada, con el shyrah pintado, ahora ya tiene todo su color -o casi todo-.
Sobre el tiempo o la naturaleza es difícil asegurar a futuro. Solo digo: Que el syrah pinta bien.

Incidiendo en el pasado, las manzanas fueron el origen, con mi padre, y sigo en ello como se puede apreciar.