Según prometimos, esta cuarta entrega la dedicamos al cardo. Presentamos los tres primeros, pues cardos hay muchos, y no basta con tres para agotar estas simpáticas y espinosas plantas.
Más abundantes, y llamados simplemente cardos son los pertenecientes a la especie carduus pycnocephalus . Alcanzan un porte cercano al metro de altura, son más esbeltos que los marianos y con flores únicas en su extremo. Su voracidad invasiva queda patente en el dicho de huerta, "quien escarda en abril de un cardo hace mil" .
Muy parecido al anterior es el carduus tenuiflorus que se diferencia de aquel en la agrupación floral, siendo en éste múltiple, mientras que en el anterior presenta una única la flor.
Aún no ha llegado el tiempo del vallecano, -que aunque no sea propiamente un cardo- es el que presenta las espinas más coriáceas. De modo que más adelante presentaré a mi vecino.
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